Aqui les va el primer capitulo, mas detallado y sin saltarme escenas. Disfrútenlo.
Contrato.
Que día más patético es este, pensó Kim mirando hacia el cielo. Estaba nublado y parecía que iba a llover. Era su primer día de clases y quería ir sola hacia su institución, ya que, sus padres de cierta manera la incomodaban.
Bajó del camión y caminó entre las calles que la dirigían a su nueva escuela. Como todavía era muy temprano el lugar aparentaba estar abandonado. Las distintas calles por las que pasó sin saber a donde iba en realidad la guiaron hasta un callejón sin salida. De pronto una capa densa de neblina cayó lentamente hasta el punto que no podía visualizar mas allá de su alrededor por unos metros, y solo un farol que desprendía una luz opaca la ayudaba a no perderse. Hasta que se tropezó con algo.
Aquella cosa gimió y sonó humano. Había tropezado con alguien. Se arrodilló a su lado con cuidado y al acercarse notó que era un joven, mas o menos de su edad, empapado de sangre. Se abstuvo de gritar y checo si aun seguía vivo depositando dos dedos sobre el cuello, justo en la yugular, no sentía la sangre correr por sus venas. Debería estar muerto. El chico volvió a gemir trayendola a la realidad de nuevo.
Kim le quitó el flequillo de sus ojos y pudo verlos, eran de un verde claro, tan claro que parecían transparentes y pudo notar también que, se veían tristes y cansados. De repente esos ojos miraron a Kim, como si al fin pudiera notar su presencia. Abrió la boca e intento hablar, pero no salía ninguna palabra de sus labios.
La chica suspiró y volteó hacia todos lados, al parecer nadie la veía. Volvió a mirar al chico y puso una mano sobre la frente del chico, que había cerrado los ojos, pero aun vivía. Poco a poco Kim se concentro y dejó que la magia hiciera lo suyo, dejó que la magia fluyera de su mano hacia el chico, recuperando sus heridas.
La cara del chico tomó color y abrió los ojos, mirándola fascinado. En cambio, kim, respiraba con dificultad mientras perlas de sudor aparecían es su frente. Lentamente retiró la mano de la frente del chico y se desmayó, cayendo sobre él.
Al despertar, se encontraba en la sala de enfermería, en una cama. Llevaba puesto una chaqueta que no era suya y que olía extrañamente a menta. Se recostó con dificultad en la cama y vio a un chico en una silla, a su lado, viéndola expectante.
-¿Quién eres?- preguntó la chica. Sus ojos le pesaban y la cabeza le dolía demasiado.
- Soy Eiryon, hace rato te traje aquí, perdona, me tome la molestia de arroparte con mi chaqueta, si no la quieres puedes devolvérmela- Contestó el chico sonriente. Kim no dejaba de ver sus ojos, eran tan hipnotizantes. Sacudió la cabeza, regresando de sus fantasías y de pronto recordó lo que había pasado hace un rato.- Por cierto, gracias por salvarme. Te debo la vida.
- No hay de que, tan solo no digas lo que acabo de hacer, o sino mucha gente...- kim calló al ver que el chico se arrodillaba frente a ella y la miraba fijamente. Alzó una mano hacia ella y tomó su mano.
-Desde ahora en adelante mi alma será tuya, Ana Kimberly De la Cruz, en agradecimiento a que me hayas salvado la vida. Tomarás mi poder prestado cuando desees y te protegeré de cualquier peligro, sea cual sea. Desde ahora en adelante estamos enlazados.- Kim sintió como en su mano se marcaba un dibujo raro que parecía mas un tatuaje de una estrella de siete picos, que al verlo por mucho tiempo daba la impresión de que daban vueltas y vueltas, como las aspas de un ventilador. Eiryon respiró hondo y besó la mano de la chica, exactamente sobre la marca que se había creado. Al hacer eso unas palabras en una escritura inteligible se formaron en un círculo alrededor de la estrella de los siete picos.
-Ya está- susurró Eiryon con una sonrisa de oreja a oreja, mostrando sus afilados colmillos. Sus ojos se tornaron de un rojo escarlata, como el color de la sangre. Parecía malvado y tenebroso.- Solo me falta un poco de sangre.
Volteo la mano de la chica y la mordió como si fuera un vampiro, succionando su sangre. Después con sus colmillos se cortó un poco el labio inferior para sacarse un poco de su sangre y sin previo aviso besó a la chica en sus labios para sellar el pacto, haciéndola probar su sangre. Eiryon se alejó un poco de la chica y la tomó en sus brazos antes de que cayera al suelo.
- Muy tonta, kim, realmente muy tonta...- murmuró alguien a lo lejos, quien los observaba con una mueca de desagrado.
Bueno, ese fue mi primer capitulo, espero les haya gustado, se que está todo muy feo, pues es mi primer fanfic, asi que tendrá muchisimos errores xD Y ésta es la página donde los subo:
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